Святий Апостол Андрій — перший архієпископ Константинопольський, патріарх Вселенський і Апостол Український.
На київських горах стояли ноги його, і очі його Україну бачили, а уста благословляли, і насіння віри він у нас насадив.
Воістину Україна нічим не менша від інших східних народів, бо і в ній проповідував Апостол.
На київських горах стояли ноги його, і очі його Україну бачили, а уста благословляли, і насіння віри він у нас насадив.
Воістину Україна нічим не менша від інших східних народів, бо і в ній проповідував Апостол.
"Reinará la gracia de Dios..."
Cuando san Andrij pervosvannij (el primer apóstol llamado por nuestro Señor Jesucristo) llegó al territorio de lo que hoy es Kiev, Ucrania (en los años 60-70 de la era común), quedó fascinado por la espectacular localización de las montañosas orillas del río Dnipro. Profetizó, entonces: “Sobre estos montes reinará la gracia de Dios; se elevará una gran ciudad y muchas iglesias se construirán en ellos”. En una de las montañas puso una cruz, como signo de que la salvación también estaba al alcance de los pueblos eslavos.
No fue, sin embargo, hasta el año 988 cuando la plena cristianización de la Rus’ de Kiev pudo completarse. En ese año, por orden del gran príncipe san Volodimir I, los residentes en la ciudad fueron bautizados en masa en el propio río Dnipro. Así, al cabo de 1000 años, justo donde el apóstol lanzó su profecía, se levantó un templo de madera en su honor.
Desafortunadamente, pese a su innegable carácter como iglesia madre para los pueblos eslavos, diferentes vicisitudes históricas y políticas le ocasionaron gran sufrimiento. Aunque sobrevivió a la destrucción de la ciudad de Kiev, por parte de las hordas de mongoles del año 1240, su metropolita pronto comenzó a residir en el nuevo principado de Moscú; esta situación continuó hasta 1448, cuando Kiev, en aquel entonces bajo dominio polaco - lituano, fue establecido como una metropolía aparte, bajo la jurisdicción de Constantinopla. Poco después, en 1461, los obispos de Moscú dejaron de usar el título de metropolitas de Kiev, para usar sólo el título de metropolitas de Moscú. Hacia finales del siglo XVII, los rusos cobraron valor y retomaron el control de Kiev: de ese modo el metropolita de esta ciudad pasó, de estar bajo la jurisdicción de Constantinopla, a la de Moscú en 1686. Este acto jamás fue reconocido por el patriarcado ecuménico.
Tras finalizar la primera guerra mundial y la revolución bolchevique en Rusia, en 1919, el nuevo gobierno de Ucrania aprobó una ley por la cual se autorizaba el establecimiento de una iglesia ortodoxa ucraniana autocéfala; a la par, un movimiento espontáneo tendiente a cortar lazos con el patriarcado de Moscú fue ganando terreno entre los fieles ortodoxos de Ucrania.
En 1924, su toda-santidad Gregorios VII (Zervoudakis), patriarca ecuménico de Constantinopla, proclamó un tomos para reestablecer la histórica metropolía de Kiev-Rus’ (Ucrania) al rango de iglesia autocéfala, y colocó la responsabilidad de constituir un nuevo sínodo de obispos sobre su beatitud, el metropolita Dionisij (Konstantin Nicolaevich Valedinskij) de Varsovia y de toda Polonia. Pero por años, a causa de la guerra y sus divisiones resultantes, los obispos de la iglesia fueron forzados a la diáspora.
No fue, sin embargo, hasta el año 988 cuando la plena cristianización de la Rus’ de Kiev pudo completarse. En ese año, por orden del gran príncipe san Volodimir I, los residentes en la ciudad fueron bautizados en masa en el propio río Dnipro. Así, al cabo de 1000 años, justo donde el apóstol lanzó su profecía, se levantó un templo de madera en su honor.
Desafortunadamente, pese a su innegable carácter como iglesia madre para los pueblos eslavos, diferentes vicisitudes históricas y políticas le ocasionaron gran sufrimiento. Aunque sobrevivió a la destrucción de la ciudad de Kiev, por parte de las hordas de mongoles del año 1240, su metropolita pronto comenzó a residir en el nuevo principado de Moscú; esta situación continuó hasta 1448, cuando Kiev, en aquel entonces bajo dominio polaco - lituano, fue establecido como una metropolía aparte, bajo la jurisdicción de Constantinopla. Poco después, en 1461, los obispos de Moscú dejaron de usar el título de metropolitas de Kiev, para usar sólo el título de metropolitas de Moscú. Hacia finales del siglo XVII, los rusos cobraron valor y retomaron el control de Kiev: de ese modo el metropolita de esta ciudad pasó, de estar bajo la jurisdicción de Constantinopla, a la de Moscú en 1686. Este acto jamás fue reconocido por el patriarcado ecuménico.
Tras finalizar la primera guerra mundial y la revolución bolchevique en Rusia, en 1919, el nuevo gobierno de Ucrania aprobó una ley por la cual se autorizaba el establecimiento de una iglesia ortodoxa ucraniana autocéfala; a la par, un movimiento espontáneo tendiente a cortar lazos con el patriarcado de Moscú fue ganando terreno entre los fieles ortodoxos de Ucrania.
En 1924, su toda-santidad Gregorios VII (Zervoudakis), patriarca ecuménico de Constantinopla, proclamó un tomos para reestablecer la histórica metropolía de Kiev-Rus’ (Ucrania) al rango de iglesia autocéfala, y colocó la responsabilidad de constituir un nuevo sínodo de obispos sobre su beatitud, el metropolita Dionisij (Konstantin Nicolaevich Valedinskij) de Varsovia y de toda Polonia. Pero por años, a causa de la guerra y sus divisiones resultantes, los obispos de la iglesia fueron forzados a la diáspora.
Nuestra presencia en México
Nuestra iglesia arribó a los Estados Unidos Mexicanos el 24 de febrero de 1997, cuando el entonces archimandrita David (René Joseph Marcel Poirier, después arzobispo de Florida y de El Caribe) logró la fundación de la Misión Ortodoxa de Barrosa, en el sur de Veracruz; y poco a poco, edificó el Skete de la Santísima Trinidad (con un estilo acorde a la región).
En 1999, con la intervención de la condesa Ghislaine Alix D’Arfeuile, obtuvo donativos del club Rotario (de Bruselas, Reino de Bélgica, y de San Andrés Tuxtla, Veracruz), para la introducción del agua potable en toda la comunidad.
En 2000, el archimandrita David (René Joseph Marcel Poirier) inició la construcción de la Capilla de la Theotokos, en Los Mangos (Veracruz).
Simultáneamente, consiguió el apoyo del principado de Mónaco, y comenzó a operar una pequeña escuela rural en el Skete, el Instituto San Mijail (Miguel), ofreciendo cursos de alfabetización y de capacitación para los indígenas popolucas de la zona.
En 2003, fue consagrado obispo, y destinado a El Caribe. Su santidad, el patriarca Moisés (Oleg Ivanovich Koulik), lo elevó al rango de arzobispo de Florida y El Caribe en 2005.
El 4 de enero de 2006, en República Dominicana, murió de un infarto, mientras visitaba una misión: había trabajado por el pueblo de Dios hasta el último minuto.
En 2008, por razones pastorales, el Skete de la Santísima Trinidad fue trasladado a Xalapa, capital de Veracruz, pero siempre conforme al carisma de su eminencia David.
Hoy, bajo la autoridad del metropolita Daniel (Daniel de Jesús Ruiz Flores) de México y de toda Latinoamérica, atendemos comunidades en los estados de Veracruz y de Jalisco. Nuestro trabajo incluye parroquias y misiones: lo hacemos con entusiasmo y sencillez, manifestando siempre nuestra identidad, y buscando ser testigos de la presencia de Cristo, a través del amor y del servicio.
En 1999, con la intervención de la condesa Ghislaine Alix D’Arfeuile, obtuvo donativos del club Rotario (de Bruselas, Reino de Bélgica, y de San Andrés Tuxtla, Veracruz), para la introducción del agua potable en toda la comunidad.
En 2000, el archimandrita David (René Joseph Marcel Poirier) inició la construcción de la Capilla de la Theotokos, en Los Mangos (Veracruz).
Simultáneamente, consiguió el apoyo del principado de Mónaco, y comenzó a operar una pequeña escuela rural en el Skete, el Instituto San Mijail (Miguel), ofreciendo cursos de alfabetización y de capacitación para los indígenas popolucas de la zona.
En 2003, fue consagrado obispo, y destinado a El Caribe. Su santidad, el patriarca Moisés (Oleg Ivanovich Koulik), lo elevó al rango de arzobispo de Florida y El Caribe en 2005.
El 4 de enero de 2006, en República Dominicana, murió de un infarto, mientras visitaba una misión: había trabajado por el pueblo de Dios hasta el último minuto.
En 2008, por razones pastorales, el Skete de la Santísima Trinidad fue trasladado a Xalapa, capital de Veracruz, pero siempre conforme al carisma de su eminencia David.
Hoy, bajo la autoridad del metropolita Daniel (Daniel de Jesús Ruiz Flores) de México y de toda Latinoamérica, atendemos comunidades en los estados de Veracruz y de Jalisco. Nuestro trabajo incluye parroquias y misiones: lo hacemos con entusiasmo y sencillez, manifestando siempre nuestra identidad, y buscando ser testigos de la presencia de Cristo, a través del amor y del servicio.
Nuestra presencia en Colombia
En el caso de la República de Colombia, la llegada y el crecimiento de nuestra iglesia estuvieron vinculados a una mujer sencilla y humilde: la ihumenia Liz (Lida Ospina Hurtado).
Nacida en Armenia-Quindío, el 5 de julio de 1948, comenzó a recibir mensajes divinos en la década de los ochenta, para que, como el propio Señor le dijera, “ayudes a levantar mi palabra hacia el nuevo mundo”. Desde un principio, dichos mensajes estuvieron acompañados por maravillosas señales, especialmente de sanación tanto espiritual como física.
El jueves 17 de septiembre de 1992 (conmemoración del profeta Moisés en el calendario patrístico), mientras arreglaba su celda, tomó la tapa de una cajita de cartón donde guardaba óleos. Cuenta la ihumenia: “sentí algo muy especial. Entonces me di cuenta: el rostro de Cristo estaba ahí plasmado”. De inmediato, exclamó: “eres tú, mi Jesús”; y pronto, brotó en su mente una oración inspirada: “divino rostro de Jesús, envuélvenos en tu luz”.
Con honda ternura, la ihumenia Liz llegó a comentar: “soy devota al divino rostro, y en cada sitio que he visitado me regalaban alguno. Pero siempre sentía que me faltaba uno. Y se lo decía a él. Hasta que él me lo dio”.
Hoy, el milagroso icono está resguardado en un santuario, en el municipio de Dosquebradas (del departamento de Risaralda). Sin embargo, la devoción que ha despertado motivó la construcción, en Cajicá, de una catedral dedicada a la Madre de Dios de la flor de lis: roguemos a Dios por su pronta culminación.
Incansable, ejemplar, madre Liz (Lida Ospina Hurtado), como era popularmente conocida, tocó a miles de corazones, en muchos países, hasta su muerte, el 28 de enero de 2023.
Nacida en Armenia-Quindío, el 5 de julio de 1948, comenzó a recibir mensajes divinos en la década de los ochenta, para que, como el propio Señor le dijera, “ayudes a levantar mi palabra hacia el nuevo mundo”. Desde un principio, dichos mensajes estuvieron acompañados por maravillosas señales, especialmente de sanación tanto espiritual como física.
El jueves 17 de septiembre de 1992 (conmemoración del profeta Moisés en el calendario patrístico), mientras arreglaba su celda, tomó la tapa de una cajita de cartón donde guardaba óleos. Cuenta la ihumenia: “sentí algo muy especial. Entonces me di cuenta: el rostro de Cristo estaba ahí plasmado”. De inmediato, exclamó: “eres tú, mi Jesús”; y pronto, brotó en su mente una oración inspirada: “divino rostro de Jesús, envuélvenos en tu luz”.
Con honda ternura, la ihumenia Liz llegó a comentar: “soy devota al divino rostro, y en cada sitio que he visitado me regalaban alguno. Pero siempre sentía que me faltaba uno. Y se lo decía a él. Hasta que él me lo dio”.
Hoy, el milagroso icono está resguardado en un santuario, en el municipio de Dosquebradas (del departamento de Risaralda). Sin embargo, la devoción que ha despertado motivó la construcción, en Cajicá, de una catedral dedicada a la Madre de Dios de la flor de lis: roguemos a Dios por su pronta culminación.
Incansable, ejemplar, madre Liz (Lida Ospina Hurtado), como era popularmente conocida, tocó a miles de corazones, en muchos países, hasta su muerte, el 28 de enero de 2023.
Hacia otras latitudes
Paulatinamente, bajo la supervisión del metropolita Daniel (Daniel de Jesús Ruiz Flores), nuestra iglesia se ha ido extendiendo a otros países.
En la República del Ecuador, el padre Elías (Fernando Rivas Mejías) encabeza la Misión de San Roman Solodkospívets (Romano el Melodioso) de Guayaquil, Provincia del Guayas; y, simultáneamente, dirige el Centro Cultural San Míkola Mirijskogo (Nicolás de Mira).
Con el apoyo de su esposa, la pani-matka Karuz Martina Gruber Manrique, realiza una muy importante difusión tanto del canto bizantino como de la iconografía. El padre Elías obtuvo la maestría en Canto en la Националната Музикална Академия “Професор Панчо Владигеров“ (Academia Estatal de Música "Profesor Pancho Vladigerov) de Sofía, República de Bulgaria. La pani-matka Karuz, a su vez, cursó estudios libres de iconografía bizantina, con los maestros Nikolai Kolev, Peter Petrov y Agnesa Petrova.
Lo anterior, desde luego, constituye un verdadero desafío: proclamar la fe sin menoscabo de la identidad cultural.
La iglesia ha entendido siempre que la catolicidad y la ortodoxia no dependen de la uniformidad de culto o de práctica, sino que, por el contrario, presuponen un marco de libertad, de pluralidad y de respeto a la diversidad legítima.
En pentecostés, es cierto, la efusión del Espíritu Santo mostró la necesidad de evangelizar en el lenguaje de aquellos a quienes se dirige el mensaje. Pero, ya antes, el propio Señor Jesucristo nos había dado ejemplo: si el Verbo de Dios se acercó a la humanidad, habitando entre nosotros (Cfr. Juan 1, 14), haciéndose uno de nosotros, semejante a nosotros en todo, menos en el pecado, ¿por qué no hemos de aceptar la inculturación, poniéndola en la perspectiva del axioma patrístico: “Lo que no se asume, no se salva”? ¿Acaso dudamos que nuestro Señor está siempre presente, de diferentes maneras, en la historia y en los pueblos; y que, al igual que el viento, el Espíritu Santo “sopla donde quiere: tú oyes su voz, pero no sabes de dónde viene ni adónde va” (Juan 3, 8)?
El evangelio necesita asumir a todas las culturas para que se haga explícito que todas ellas participan de la obra redentora de Cristo.
En la República del Ecuador, el padre Elías (Fernando Rivas Mejías) encabeza la Misión de San Roman Solodkospívets (Romano el Melodioso) de Guayaquil, Provincia del Guayas; y, simultáneamente, dirige el Centro Cultural San Míkola Mirijskogo (Nicolás de Mira).
Con el apoyo de su esposa, la pani-matka Karuz Martina Gruber Manrique, realiza una muy importante difusión tanto del canto bizantino como de la iconografía. El padre Elías obtuvo la maestría en Canto en la Националната Музикална Академия “Професор Панчо Владигеров“ (Academia Estatal de Música "Profesor Pancho Vladigerov) de Sofía, República de Bulgaria. La pani-matka Karuz, a su vez, cursó estudios libres de iconografía bizantina, con los maestros Nikolai Kolev, Peter Petrov y Agnesa Petrova.
Lo anterior, desde luego, constituye un verdadero desafío: proclamar la fe sin menoscabo de la identidad cultural.
La iglesia ha entendido siempre que la catolicidad y la ortodoxia no dependen de la uniformidad de culto o de práctica, sino que, por el contrario, presuponen un marco de libertad, de pluralidad y de respeto a la diversidad legítima.
En pentecostés, es cierto, la efusión del Espíritu Santo mostró la necesidad de evangelizar en el lenguaje de aquellos a quienes se dirige el mensaje. Pero, ya antes, el propio Señor Jesucristo nos había dado ejemplo: si el Verbo de Dios se acercó a la humanidad, habitando entre nosotros (Cfr. Juan 1, 14), haciéndose uno de nosotros, semejante a nosotros en todo, menos en el pecado, ¿por qué no hemos de aceptar la inculturación, poniéndola en la perspectiva del axioma patrístico: “Lo que no se asume, no se salva”? ¿Acaso dudamos que nuestro Señor está siempre presente, de diferentes maneras, en la historia y en los pueblos; y que, al igual que el viento, el Espíritu Santo “sopla donde quiere: tú oyes su voz, pero no sabes de dónde viene ni adónde va” (Juan 3, 8)?
El evangelio necesita asumir a todas las culturas para que se haga explícito que todas ellas participan de la obra redentora de Cristo.
Sucesión ininterrumpida
Nuestro clero tiene las líneas apostólicas y canónicas tanto del metropolita Dionisij (Konstantin Nicolaevich Valedinskij) de Varsovia y de toda Polonia, como del patriarca Aleksij I (Sergej Vladimirovich Simanskij) de Moscú y de toda Rusia, ambos de bendita memoria.
Su santidad el patriarca Gregorious IV (Gantos George Haddad) de Antioquía y de todo el Oriente fue, en 1913, el consagrante principal del metropolita Dionisij (Konstantin Nicolaevich Valedinskij); quien, en 1932, fue el consagrante principal del metropolita Polikarp (Petr Dmitirevich Sikorskij); quien, en 1942, fue el consagrante principal del metropolita Nikanor (Nikanor Nikandrovich Burchak-Abramovich); quien, en 1942, fue el consagrante principal del metropolita Grigorij (Grigorij Oguijchuk); quien, en 1969, fue el consagrante principal del metropolita Andrij (William Prazskij); quien, en 1988, fue el consagrante principal del metropolita Aleksij (Nizza); quien, en 1999, fue el consagrante principal de los metropolitas Stepan (Babij Petrovich) y Mijail (Javchak Champion).
El 10 de Octubre de 2002, en la Saints Boris and Gleb Ukrainian Orthodox Cathedral (Catedral Ortodoxa Ucraniana de los Santos Boris y Glib) de Cleveland, Ohio, los metropolitas Stepan (Babij Petrovich) y Mijail (Javchak Champion) consagraron al metropolita Moisés (Oleg Ivanovich Koulik) de Kiev y de toda la Rus'-Ucrania; quien, el 17 de junio de 2005 fue elevado a patriarca por el santo sínodo de la Iglesia Ortodoxa Ucraniana Autocéfala Canónica, en la Собор Святої Софії (Catedral de Santa Sofía) de Kiev, Ucrania, donde posteriormente se le entronizó.
El metropolita Daniel (Daniel de Jesús Ruiz Flores) de México y de toda Latinoamérica es, paralelamente, cuarto en sucesión del metropolita Dionisij (Konstantin Nicolaevich Valedinskij), pues, en 1941, éste fue el principal consagrante del arzobispo Palladiusz (Petro Vidibida Rudenko), jerarca jefe de la Iglesia Ortodoxa Ucraniana Autocéfala en el Exilio, reconocido como autocéfalo y en comunión con su toda santidad el patriarca Athenágoras (Aristokles Spyrou) de Constantinopla.
Palladiusz (Petro Vidibida Rudenko) fue, en 1967, el consagrante principal del arzobispo Joseph (Joseph Anthony McCormack); quien, en 1977, fue el consagrante principal del arzobispo Daniel (Daniel James Dever Dahl).
El 19 de enero 2003, el arzobispo Daniel (Daniel James Dever Dahl) ratificó y co-consagró al obispo Daniel (Daniel de Jesús Ruiz Flores).
El 2 de diciembre de 2005, en Kiev, Ucrania, su santidad Moisés (Oleg Ivanovich Koulik), entonces patriarca de Kiev y de toda la Rus'-Ucrania, elevó a vladika Daniel (Daniel de Jesús Ruiz Flores) a arzobispo; y, el 7 de mayo de 2006, en esa misma ciudad, le impuso solemnemente las manos. Posteriormente, el 19 de abril de 2009, lo elevó a metropolita de México y de toda Latinoamérica.
Además, como signo fraterno, el 2 de abril de 2012, en Moscú, Federación Rusa, su santidad Venedikt (Aleksej Sergiivich Molchanov), entonces patriarca de Moscú y de toda Rusia de la Iglesia de las Catacumbas Verdadero-Ortodoxa Rusa, transmitió su sucesión apostólica a los jerarcas de la Iglesia Ortodoxa Ucraniana en México.
Su beatitud el metropolita Nikanor (Nikanor Nikandrovich Burchak-Abramovich) fue, en 1942, el consagrante principal del obispo Mstislav (Stepan Ivanovich Skripnik).
Vladika Mstislav (Stepan Ivanovich Skripnik) fue elevado a arzobispo en 1947; y a metropolita, en 1949. En 1990, a la edad de 92 años, resultó elegido in absentia como primer patriarca de Kiev y de toda la Rus’-Ucrania; y fue entronizado el 6 de noviembre de 1990, en la Собор Святої Софії (Catedral de Santa Sofía) de Kiev, Ucrania.
A su vez, el patriarca Mstislav (Stepan Ivanovich Skripnik) fue, en 1985, el consagrante principal del obispo Antonij (Ioan Ivanovich Szczerba; John Scharba, en inglés).
En 1995, vladika Antonij (Ioan Ivanovich Szczerba) fue recibido bajo el omoforion del su toda-santidad Bartholomaíos I (Dimitrios Arjondonis), patriarca ecuménico de Constantinopla; y, en 2013, elevado a metropolita y primer jerarca de la Ukrainian Orthodox Church of the United States of America (Iglesia Ortodoxa Ucraniana de los Estados Unidos de América).
A su vez, el metropolita Antonij (Ioan Ivanovich Szczerba) fue, en 1993, el re-consagrante principal del metropolita Volodimir (Vasil Omelianovych Romaniuk), cuando éste se incardinó en la Iglesia Ortodoxa Ucraniana Autocéfala.
Vladika Volodimir (Vasil Omelianovych Romaniuk) había sido consagrado, en 1990, por el metropolita Ioann (Vasilij Nicolaevich Bodnarchuk); y elevado a arzobispo en 1991. El 21 de octubre de 1993, fue elegido patriarca de Kiev y de toda la Rus’-Ucrania; y elevado y entronizado, tres días más tardes, el 24 de octubre, en la Собор Святої Софії (Catedral de Santa Sofía) de Kiev, Ucrania.
A su vez, el patriarca Volodimir (Vasil Omelianovych Romaniuk), en 1995, fue el principal consagrante del metropolita Mefodij (Valerij Andrijovich Kudriakov); quien, en 1996, fue el principal consagrante del metropolita Stefan (Vitalij Dmitrievich Linitskij); quien, en 2000, fue el principal consagrante del obispo Venedikt (Aleksej Sergiivich Molchanov).
Vladika Venedikt (Aleksej Sergiivich Molchanov) fue elevado a arzobispo en 2001; a metropolita, en 2002; y elevado y entronizado como patriarca de Moscú y de toda Rusia, el 5 de septiembre de 2010, en el Серафимо-Понетаевский Монастырь (Monasterio Serafim-Ponetaevka) de Ponateavka, Federación Rusa.
Su santidad el patriarca Gregorious IV (Gantos George Haddad) de Antioquía y de todo el Oriente fue, en 1913, el consagrante principal del metropolita Dionisij (Konstantin Nicolaevich Valedinskij); quien, en 1932, fue el consagrante principal del metropolita Polikarp (Petr Dmitirevich Sikorskij); quien, en 1942, fue el consagrante principal del metropolita Nikanor (Nikanor Nikandrovich Burchak-Abramovich); quien, en 1942, fue el consagrante principal del metropolita Grigorij (Grigorij Oguijchuk); quien, en 1969, fue el consagrante principal del metropolita Andrij (William Prazskij); quien, en 1988, fue el consagrante principal del metropolita Aleksij (Nizza); quien, en 1999, fue el consagrante principal de los metropolitas Stepan (Babij Petrovich) y Mijail (Javchak Champion).
El 10 de Octubre de 2002, en la Saints Boris and Gleb Ukrainian Orthodox Cathedral (Catedral Ortodoxa Ucraniana de los Santos Boris y Glib) de Cleveland, Ohio, los metropolitas Stepan (Babij Petrovich) y Mijail (Javchak Champion) consagraron al metropolita Moisés (Oleg Ivanovich Koulik) de Kiev y de toda la Rus'-Ucrania; quien, el 17 de junio de 2005 fue elevado a patriarca por el santo sínodo de la Iglesia Ortodoxa Ucraniana Autocéfala Canónica, en la Собор Святої Софії (Catedral de Santa Sofía) de Kiev, Ucrania, donde posteriormente se le entronizó.
El metropolita Daniel (Daniel de Jesús Ruiz Flores) de México y de toda Latinoamérica es, paralelamente, cuarto en sucesión del metropolita Dionisij (Konstantin Nicolaevich Valedinskij), pues, en 1941, éste fue el principal consagrante del arzobispo Palladiusz (Petro Vidibida Rudenko), jerarca jefe de la Iglesia Ortodoxa Ucraniana Autocéfala en el Exilio, reconocido como autocéfalo y en comunión con su toda santidad el patriarca Athenágoras (Aristokles Spyrou) de Constantinopla.
Palladiusz (Petro Vidibida Rudenko) fue, en 1967, el consagrante principal del arzobispo Joseph (Joseph Anthony McCormack); quien, en 1977, fue el consagrante principal del arzobispo Daniel (Daniel James Dever Dahl).
El 19 de enero 2003, el arzobispo Daniel (Daniel James Dever Dahl) ratificó y co-consagró al obispo Daniel (Daniel de Jesús Ruiz Flores).
El 2 de diciembre de 2005, en Kiev, Ucrania, su santidad Moisés (Oleg Ivanovich Koulik), entonces patriarca de Kiev y de toda la Rus'-Ucrania, elevó a vladika Daniel (Daniel de Jesús Ruiz Flores) a arzobispo; y, el 7 de mayo de 2006, en esa misma ciudad, le impuso solemnemente las manos. Posteriormente, el 19 de abril de 2009, lo elevó a metropolita de México y de toda Latinoamérica.
Además, como signo fraterno, el 2 de abril de 2012, en Moscú, Federación Rusa, su santidad Venedikt (Aleksej Sergiivich Molchanov), entonces patriarca de Moscú y de toda Rusia de la Iglesia de las Catacumbas Verdadero-Ortodoxa Rusa, transmitió su sucesión apostólica a los jerarcas de la Iglesia Ortodoxa Ucraniana en México.
Su beatitud el metropolita Nikanor (Nikanor Nikandrovich Burchak-Abramovich) fue, en 1942, el consagrante principal del obispo Mstislav (Stepan Ivanovich Skripnik).
Vladika Mstislav (Stepan Ivanovich Skripnik) fue elevado a arzobispo en 1947; y a metropolita, en 1949. En 1990, a la edad de 92 años, resultó elegido in absentia como primer patriarca de Kiev y de toda la Rus’-Ucrania; y fue entronizado el 6 de noviembre de 1990, en la Собор Святої Софії (Catedral de Santa Sofía) de Kiev, Ucrania.
A su vez, el patriarca Mstislav (Stepan Ivanovich Skripnik) fue, en 1985, el consagrante principal del obispo Antonij (Ioan Ivanovich Szczerba; John Scharba, en inglés).
En 1995, vladika Antonij (Ioan Ivanovich Szczerba) fue recibido bajo el omoforion del su toda-santidad Bartholomaíos I (Dimitrios Arjondonis), patriarca ecuménico de Constantinopla; y, en 2013, elevado a metropolita y primer jerarca de la Ukrainian Orthodox Church of the United States of America (Iglesia Ortodoxa Ucraniana de los Estados Unidos de América).
A su vez, el metropolita Antonij (Ioan Ivanovich Szczerba) fue, en 1993, el re-consagrante principal del metropolita Volodimir (Vasil Omelianovych Romaniuk), cuando éste se incardinó en la Iglesia Ortodoxa Ucraniana Autocéfala.
Vladika Volodimir (Vasil Omelianovych Romaniuk) había sido consagrado, en 1990, por el metropolita Ioann (Vasilij Nicolaevich Bodnarchuk); y elevado a arzobispo en 1991. El 21 de octubre de 1993, fue elegido patriarca de Kiev y de toda la Rus’-Ucrania; y elevado y entronizado, tres días más tardes, el 24 de octubre, en la Собор Святої Софії (Catedral de Santa Sofía) de Kiev, Ucrania.
A su vez, el patriarca Volodimir (Vasil Omelianovych Romaniuk), en 1995, fue el principal consagrante del metropolita Mefodij (Valerij Andrijovich Kudriakov); quien, en 1996, fue el principal consagrante del metropolita Stefan (Vitalij Dmitrievich Linitskij); quien, en 2000, fue el principal consagrante del obispo Venedikt (Aleksej Sergiivich Molchanov).
Vladika Venedikt (Aleksej Sergiivich Molchanov) fue elevado a arzobispo en 2001; a metropolita, en 2002; y elevado y entronizado como patriarca de Moscú y de toda Rusia, el 5 de septiembre de 2010, en el Серафимо-Понетаевский Монастырь (Monasterio Serafim-Ponetaevka) de Ponateavka, Federación Rusa.